miércoles, 22 de mayo de 2013

Capitulo 17

Hola mis lectoras, primero que nada MIL GRACIAS POR AYUDARME A PASAR LAS 1000 VISITAS, LAS AMARE TODA LA VIDA POR ESO!! 

Si la verdad que fue como un WOW!! cuando abri mi blog y vi las estadisticas! ya me andaban sacando lagrimas :') bueno, ahora si les dire del capitulo:) 

ojala les guste, lamento la tardanza pero me cortaron el internet por exceso de pago:P jajajaXD claro! 
Me encanto esta frase, esta genial! este señor tuvo demasiada razon al decir esto, o escribirlo por que, para los que no lo saben, el escribio "El retrato de Dorian Grey" y "El fantasma de Canterville", el ultimo no estoy muy segura lo lei cuando estaba en la primara, hace un buen, buen tiempo, pero por mi intuicion femenina creo que si es de el. 


"No mires las diferencias, mirate a ti mismo"
Tambien que creo que lo dije en mi otro blog, pero estuve leyendo los libros de "Hush, Hush" y "Cazadores de Sombras" LEANLOS!!! no se van a arrepentir, son demasiado geniales y sus protagonistas son estupidos y sensuales (mas sensuales que estupidos)!! Son tan WOW!! te dejan sin palabras. bueni, ahora si la entrada, y gracias por sus visitas! 

-*-*-*-*-*-*








Me sente de vuelta, no sabia por donde empezar.

-¿Siempre se tratan asi? – pregunte tragándome la timidez tan característica mia.

-Usualmente. – se encogio de hombros. – Supongo que te has dado cuenta que es difícil tratar con Daniel, hasta es mas fácil tratarlo de esa manera. – asentí, dándole nuevamente la razón. – Creo que es la primera vez que muestra una emoción verdadera sin tener que provocarle.

Enarque una ceja, si lo de hace rato no fue una provocación entonces, ¿Qué rayos fue?

-Se lo que piensas, pero hasta ahora nunca demostró algo por lo que se interesase y mas aun, algo que le importase lo suficiente para perder la compustura. – inhale profundamente, le importo sonrei internamente . – Mejor cuéntame de ti.

-La verdad no hay mucho que contar. – me encogi de hombros. – Soy bastante aburrida.

-Daniel no dice lo mismo. – abri mucho los ojos, le conto de mi. – No te alarmes, estaba muy confundido.

-Tengo una hermana gemela, a ella le toco ser la bonita. – solte una risita nerviosa. – yo soy la aburrida, nerd… ya sabe todo eso.

-¿Qué te hace pensar eso? – me estaba psicologeando, ya entro en su faceta profesional.

-No soy sociable, no se me da. – admiti mirando la planta artificial de la esquina detrás de el. – Me cuesta confiar y admitir sentimientos, la escuela se me da aunque no se muy bien por que. Soy un iman para los balones, siempre terminan dándome en la cabeza. – sonrei recordando la ultima vez. – Mi hermana… no se desde cuando deje de caerle bien, de niñas no era asi. Siempre nos ayudábamos y jugábamos juntas. No se que que le hizo cambiar.

-¿Has pensado que quizás fuiste tu quien cambio? – eso me tomo por sorpresa. No me lo espere.

-Siempre he sido yo. – respondi como reflejo pero la idea no se me saldría de la cabeza en un buen rato. – No creo haber cambiado.

-De acuerdo, hasta aquí llegamos por hoy. – cerro la libreta donde tomaba apuntes. – Te preguntas porque le pedi a Daniel que te trajera.

-La verdad es que no. – negué con la cabeza. – Crei que solo era curiosidad.

-Me dejaste impresionado. - ¿halago o insulto? Difícil decisión. – ¿Ya te ha contado lo que le sucedio?

-Si, ya lo hizo. – torci un poco el gesto, no fue mi momento favorito lo admito, pero me gusto que confiara en mi.

-¿Alguna pregunta? – inquirio.

Este hombre me leia la mente.

-No se… puede que sean imaginaciones mias pero, a veces tengo es sensación de que se aleja de las personas que tratan de acercarse. – solte mi duda al fin.

-No son imaginación tuyas. – negó con una sonrisa triste. – La mente de mi paciente es compleja, frágil, cerrada y a veces incluso auto-destructiva. – tomo todo el aire que pude para soltarlo suavemente. – Se odia por lo que causo, no deja pasar ninguna oportunidad para volver a recordar la culpa. Hacer eso, alejarse de las personas, es como su autodefensa. Y curiosamente no se aleja de ti.

-¿Curiosamente?

-Si. – respondio sereno. – No se que efecto tengas en el, pero sigue asi; Daniel ha mejorado considerablemente mas en estas semanas que con todas las terapias que hemos intentado.

-No se que decir. – me relaje en mi silla.

-No digas nada, el tiempo termino hay que irnos.

¿Cuándo entro Daniel? 

-Se toca antes de entrar. – le reprendio el doctor, Daniel se encogio de hombros como si nada; sonrei era parte de su terapia.

-Fue un placer conocerte Victoria. – asentí tendiendo mi mano para estrecharla.

-Lo mismo digo. – le respondi. – Vamonos antes de que te de una paro cardiaco. – tome la mano tendida que Daniel me ofrecia.

-Espero verte pronto. – ofrecio el doctor, asentí, aun teníamos mucho de que hablar.

-Igual.

Cerro la puerta tras de mi, no se veía molesto en apariencia.

-¿Qué te parecio? – me pregunto empujando la puerta para que saliera de este hospital.

-Fue… interesante. – eso sono mas como una pregunta. – El doc es agradable, no entiendo porque se llevan tan mal.

-Es parte de nosotros. – se encogio de hombros visiblemanete mas relajado.

-Supongo que si. – acorde. - ¿A dónde quieres ir? – pregunte mientras me subia al auto.

-Que te parece si vamos a mi casa. – sugirió.

Que bien que no estaba tomando refresco porque seguramente el cristal del auto estaría empapado de donde lo hubiera escupido o yo estaría ahogándome por atragantarme.

-Yo… no creo que sea una idea muy buena, tu sabes… - que estúpido sono eso Victoria, me reprendi mentalmente, ahora pensara que no quieres estar con el.

-Mis padres están, quiero que los conozcas. – aclaro, debo aprender a ocultar mejor mis reacciones.

Eso me da aun mas miedo que estar los dos solos en su casa. 

1 comentario:

LOBEZNA dijo...

Poco a poco irás consiguiendo más cosas. Enhorabuena. Un abrazo.